miércoles, noviembre 29, 2006

Los ingleses cayeron en Turienzo

Es un poco largo, pero merece la pena. Algo tenía que tener ese pueblo para que nos llamarámos escoceses.

16-1-1809. Batalla de La Coruña.

El ejército británico al mando de Sir John Moore, después de la Convención de Cintra, penetro en España y estableció su cuartel general en Salamanca. Desde allí partió el 12 de diciembre por el camino de Valladolid, ansioso de auxiliar la capital del reino, más al tener noticia de que ésta había capitulado, varió de dirección en Toro y Benavente, para reunirse con otras fuerzas británicas que se hallaban en Astorga y con el marqués de La Romana que se encontraba en León, a donde se había retirado después de la derrota de Espinosa de los Monteros, y ver de batir al mariscal Soult. No le dio tiempo Napoleón de verificar su intento, pues el 21 de diciembre, cuando el general británico se hallaba aún en Sahagún, salió el Emperador de Madrid al frente de unos 60.000 hombres, franqueó la sierra del Guadarrama el 23, paso difícil y en aquella época comparable al de los Alpes, pernoctó la noche de Navidad en Villacastín y alcanzó Tordesillas el día 26. El día 1 de enero, después de abandonar la ciudad los británicos se hallaban reunidos ya en Astorga 80.000 franceses, de ellos 20.000 de Caballería. Los británicos, decididos a retirarse hacia Galicia y allí embarcarse en alguno de sus puertos, emprendieron la dura marcha por el puerto del Manzanal en la mañana del 31 de diciembre. Entretanto el marqués de La Romana marchaba por Fuentecebadón en dirección a Puebla de Tribes (Orense), arrastrando los restos de su nuevamente destrozada fuerza. La segunda División del marqués de La Romana había sido sorprendida por el general Franceschi el 29 en Mansilla de las Mulas, envolviendo al Regimiento de León, y obligándolo a rendirse quedarían en su poder 13 oficiales y 996 soldados, entre los muertos se hallaba el comandante D. Mariano Rojo. La primera División seria acometida por la caballería francesa al amanecer del día 1 de enero en Turienzo de los Caballeros. Dos batallones del Regimiento de Mallorca que el 30 de diciembre se habían sostenido durante siete horas de lucha y evasiones, cubriendo los vados del río Tiétar, rechazando cuatro veces con su vivo y certero fuego a los jinetes franceses, quedaron muertos sobre el campo al emprender la desordenada retirada a pesar del denuedo con que se defendieron. El Regimiento del Rey, envuelto de similar modo, hubo de rendirse y así logró salvar algunos oficiales y soldados con las banderas del regimiento.

Un poco de historia: La toma de Granada (2006)


Pilarina no puede salir porque estaba en los jardines del Generalife.

viernes, noviembre 24, 2006

Tácticas escocesas de batalla


“…cuando los caballeros ingleses fueron al ataque hacia los escoceses, Wallace, ante el ímpetu de sus soldados, tuvo que relajarlos y pedir que esperaran a que el enemigo viniera. Mientras, Moray y sus jinetes en una buena maniobra se había posicionado en unos de los flancos ingleses al otro lado del río. Wallace dio la orden de ataque. Primero ordenó que los arqueros dispararan una lluvia de flechas hacia los jinetes ingleses, en el momento en que Moray embestía contra el ejército inglés, partiéndolo en dos y dejando a unos 5.000 infantes y jinetes enemigos aislados. Wallace y sus guerreros salieron en tromba hacia los ingleses aislados y con sus claymore (gigantes espadas escocesas de 1'64m) los destrozaron, incluso desmontaron a muchos y los arrojaron al río, ahogándose rápidamente por el peso de sus armaduras. Warenne envió refuerzos, pero esto fue peor porque el puente no pudo soportar tanto peso y cedió llevándose a cientos de ingleses al agua que murieron ahogados, entre ellos, Cressingham. Los escoceses lanzaron un contraataque que causó la retirada inglesa y el final de una batalla victoriosa para William Wallace y para Escocia…” (Stirling, 11 de septiembre del año 1297 de Nuestro Señor)

Para profundizar un poco más en las escaramuzas celtas, no se puede pasar por alto uno de los ataques favoritos: el montonete. A pesar de que se me atribuye el invento, realmente lo aprendí en Irlanda, mucho antes de conocer a David O’Connor. Y lo cierto es que los irlandeses fueron víctimas de esos montonetes aplicados por compatriotas nuestros.
El mecanismo es sencillo: se elige una víctima, se hace que caiga al suelo (por el método que sea menester) y una pila de energúmenos cae encima de ella, dejándola totalmente groggy. El resultado es que no volverá a decir o hacer la gilipollez que haya dicho o hecho en un largo periodo de tiempo. En Irlanda, llegué a ver uno en que participaron hasta 20 personas. Huelga decir que el que estaba debajo no nos habló en una semana, del cabreo que tenía.
Lo bueno de esta táctica es que existen muchas variantes: el montonete con naranja, el indoor, el montonete trampa, el amago de montonete, el rompe-costillas y el montonete con helicóptero.
El primero sucedió en Chana. Mientras Wallace descansaba plácidamente, tumbado al lado de media naranja y charlando con Platanito, me acerqué a traición y volé sobre él. Resultado: Cara y gafas de Pepe estampadas contra la naranja.
Luego vendría la venganza, conjuntamente realizada con McChains, en Turienzo. Una mañana, estando yo con muy pocas ganas de levantarme del saco, cayeron ambos sobre mí, doblando el palo de la tienda y yo gritándoles de todo (nada bonito). Resultado: tienda casi por el suelo y pillada de Longshanks, que nos miró con cara de ‘no me lo puedo creer’. Así se realiza el indoor.
El montonete trampa fue en la Cruz del Ferro, exclusivamente para Longshanks, en el que yo mismo hice de cebo. Mientras todos se lanzaban hacia ambos, me escabullí como pude (más mal que bien) para que él estuviera en la parte baja del bollo.
El amago es una especialidad de McMax, que puede catapultarme sin que yo tenga que coger carrerilla. Ocurrió dentro de la casa de Turienzo, en el que íba yo a caer encima de Dasi, tumbada encima de unas colchonetas. Ante su incredulidad, McMax me ofreció lanzarme como quien ayuda a alguien a trepar una valla, y Dasi se revolvió para evitar que yo le cayera encima. Resultado: pantalones de Dasi rotos por la zona del trasero y el letrado y yo, llorando de la risa.
El rompe-costillas lo sufrió nuestro líder en Benasque, justo a la llegada de lady Storm. Durante una representación teatral, se introdujo la siguiente morcilla: hacer un montonete bestial a O’Connor. Rápidamente, este adoptó posición fetal con un codo apuntando hacia arriba. El primero en caer fue Wallace, que se comió el codo. A continuación aterrizaron A. Mcfly, lord Peter Knows (vaya par de pesos pesados), McWhite, McPatiwen,…yo que sé cuántos más, y yo. Resultado: Wallace, con una costilla rota pero sin condecoración ni nada. Qué injusticia.
El último consiste en volar literalmente sobre la presa. Lo han sufrido prácticamente todos, yo incluido, y las consecuencias son devastadoras. El enemigo queda totalmente maltrecho tras este ataque y no le quedan más ganas de seguir luchando. Su eficacia, combinada con otros ataques, nos asegurará la victoria contra Inglaterra.

miércoles, noviembre 22, 2006

Para empezar, una pequeña aportación

Mi primera andanza por estos derroteros han propiciado que pueda acercar, no sólo a los miembros de esto nuestro clan, sino al resto de los españolitos lectores del rotativo, o no, Marca, a un poco de tierra pseudoescocesa -Sobrepeña- muy cercana, según cuentan los textos antiguos, con el comienzo de esta historia: Turienzo. He aquí la prueba...

Fotos del Viaje (I)


Turienzo, donde nació Escocia

Un paseo por las nubes

Visita al río dos piedras

Turienzo

Las fotos son de Ferdinand McFly por eso no sale en ninguna, ya pondremos alguna de él.

miércoles, noviembre 15, 2006

Turienzo


martes, noviembre 14, 2006

Sobrepeña 2006 (I)


El terreno de campamento, estamos en el antiguo comedor

jueves, noviembre 09, 2006

Sobrepeña, qué recuerdos!

Por si alguno no lo sabe todavía, y mira que me extraña, estamos en Sobrepeña. Un pequeño pueblo de Santander donde íbamos de campamento hace diez años. Nostalgia y recuerdos es lo que está predominando, sobre todo, cuando hemos pisado el antiguo campamento. Todo sigue igual, hemos ido al santuario de Montesclaros, donde no os preocupéis hemos sacado tiempo para rezar algo por todos. Por cierto, el monje de siempre, sigue más viejo y nos ha vuelto a enseñar la colección de mariposas. Ya os mandaremos fotos, mañana nos reunimos con Andrés y Lola en Turienzo, otro gran momento. Lo bueno de esto es que la gente se acuerda de nosotros, más de José María, que dejó huella, pero nos lo estamos pasando fenomenal reviviendo todas las marchas de aquellos años. Espero que podáis conocer alguna vez esto. Es otro planeta. Un planeta gracias al que descubrimos muchas cosas.

Wallace, acompañado de O'Connor, Fer McFly, Mc Max y un nuevo fichaje Jesus McMohicano Dos piedras.

La foto es en el terreno de campamento, donde estaba el comedor (nos da problemas al subirla, no sé si verá)