viernes, noviembre 24, 2006

Tácticas escocesas de batalla


“…cuando los caballeros ingleses fueron al ataque hacia los escoceses, Wallace, ante el ímpetu de sus soldados, tuvo que relajarlos y pedir que esperaran a que el enemigo viniera. Mientras, Moray y sus jinetes en una buena maniobra se había posicionado en unos de los flancos ingleses al otro lado del río. Wallace dio la orden de ataque. Primero ordenó que los arqueros dispararan una lluvia de flechas hacia los jinetes ingleses, en el momento en que Moray embestía contra el ejército inglés, partiéndolo en dos y dejando a unos 5.000 infantes y jinetes enemigos aislados. Wallace y sus guerreros salieron en tromba hacia los ingleses aislados y con sus claymore (gigantes espadas escocesas de 1'64m) los destrozaron, incluso desmontaron a muchos y los arrojaron al río, ahogándose rápidamente por el peso de sus armaduras. Warenne envió refuerzos, pero esto fue peor porque el puente no pudo soportar tanto peso y cedió llevándose a cientos de ingleses al agua que murieron ahogados, entre ellos, Cressingham. Los escoceses lanzaron un contraataque que causó la retirada inglesa y el final de una batalla victoriosa para William Wallace y para Escocia…” (Stirling, 11 de septiembre del año 1297 de Nuestro Señor)

Para profundizar un poco más en las escaramuzas celtas, no se puede pasar por alto uno de los ataques favoritos: el montonete. A pesar de que se me atribuye el invento, realmente lo aprendí en Irlanda, mucho antes de conocer a David O’Connor. Y lo cierto es que los irlandeses fueron víctimas de esos montonetes aplicados por compatriotas nuestros.
El mecanismo es sencillo: se elige una víctima, se hace que caiga al suelo (por el método que sea menester) y una pila de energúmenos cae encima de ella, dejándola totalmente groggy. El resultado es que no volverá a decir o hacer la gilipollez que haya dicho o hecho en un largo periodo de tiempo. En Irlanda, llegué a ver uno en que participaron hasta 20 personas. Huelga decir que el que estaba debajo no nos habló en una semana, del cabreo que tenía.
Lo bueno de esta táctica es que existen muchas variantes: el montonete con naranja, el indoor, el montonete trampa, el amago de montonete, el rompe-costillas y el montonete con helicóptero.
El primero sucedió en Chana. Mientras Wallace descansaba plácidamente, tumbado al lado de media naranja y charlando con Platanito, me acerqué a traición y volé sobre él. Resultado: Cara y gafas de Pepe estampadas contra la naranja.
Luego vendría la venganza, conjuntamente realizada con McChains, en Turienzo. Una mañana, estando yo con muy pocas ganas de levantarme del saco, cayeron ambos sobre mí, doblando el palo de la tienda y yo gritándoles de todo (nada bonito). Resultado: tienda casi por el suelo y pillada de Longshanks, que nos miró con cara de ‘no me lo puedo creer’. Así se realiza el indoor.
El montonete trampa fue en la Cruz del Ferro, exclusivamente para Longshanks, en el que yo mismo hice de cebo. Mientras todos se lanzaban hacia ambos, me escabullí como pude (más mal que bien) para que él estuviera en la parte baja del bollo.
El amago es una especialidad de McMax, que puede catapultarme sin que yo tenga que coger carrerilla. Ocurrió dentro de la casa de Turienzo, en el que íba yo a caer encima de Dasi, tumbada encima de unas colchonetas. Ante su incredulidad, McMax me ofreció lanzarme como quien ayuda a alguien a trepar una valla, y Dasi se revolvió para evitar que yo le cayera encima. Resultado: pantalones de Dasi rotos por la zona del trasero y el letrado y yo, llorando de la risa.
El rompe-costillas lo sufrió nuestro líder en Benasque, justo a la llegada de lady Storm. Durante una representación teatral, se introdujo la siguiente morcilla: hacer un montonete bestial a O’Connor. Rápidamente, este adoptó posición fetal con un codo apuntando hacia arriba. El primero en caer fue Wallace, que se comió el codo. A continuación aterrizaron A. Mcfly, lord Peter Knows (vaya par de pesos pesados), McWhite, McPatiwen,…yo que sé cuántos más, y yo. Resultado: Wallace, con una costilla rota pero sin condecoración ni nada. Qué injusticia.
El último consiste en volar literalmente sobre la presa. Lo han sufrido prácticamente todos, yo incluido, y las consecuencias son devastadoras. El enemigo queda totalmente maltrecho tras este ataque y no le quedan más ganas de seguir luchando. Su eficacia, combinada con otros ataques, nos asegurará la victoria contra Inglaterra.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

http://www.acgmjovenes.blogspot.com/
poner el link mal...eso si q es juego sucio...ya se lo comentare a los ingleses a ver que opinan
xD
Bellatrix

FERDINAND MCFLY dijo...

Oye, Ceci, que yo no he puesto ningún link...aunque me parece una excelente medida para la guerra de medios.
En serio, muy buena la página nueva de ACG.

Pepe Gª-Carpintero dijo...

Una vez más, creo que el culpable del link he sido yo. Al enemigo siempre hay que respetarlo. Aunque sea una cuadrilla de frikis, por lo tanto pido disculpas y en breve cambiaré la dirección. Por una vez en la vida no fue a propósito

Pepe Gª-Carpintero dijo...

Solucionado el problema del link de esa pagina francesa-inglesa. je je

Anónimo dijo...

Otro tipo de montonete que añadiría es el montonete-clerical. Poco común. Utilizado por los Ingleses y consistente en un grupo de ingleses (y alguno más) lanzandose en picado ante la incrédula presa. De resultados devastadores (posiblemente por las bondades del cocinero del seminario). Si no, que se lo pregunten a Wallace.

Pepe Gª-Carpintero dijo...

Ya estaba echando de menos lo del montonete clerical. Fue brutal el atentado que sufrí por parte de la corona inglesa. Jejeje

Pepe Gª-Carpintero dijo...

Que risa tan malvada